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El Senado aprueba las Leyes Secundarias de la Guardia Nacional

 

El martes 21 de mayo, la actividad legislativa en el Senado de la República comenzó desde temprano, minutos antes de las 10:00 horas, las y los coordinadores de todas las fracciones parlamentarias en la Cámara Alta, dieron a conocer en conferencia de prensa celebrada en la sala de protocolo de la Junta de Coordinación Política, que se había logrado construir la unanimidad para aprobar las Leyes Secundarias de la Guardia Nacional.

 

Para alcanzar el acuerdo, fueron necesarios más de cuarenta días de análisis por parte de todas las fuerzas políticas. Se modificó el 70% del contenido de las leyes presentadas por el Ejecutivo, lo que da cuenta de un poder legislativo que realmente representa un contrapeso serio, responsable y plural, un aspecto que resulta esencial para el fortalecimiento de la democracia mexicana.

 

Aunque el grupo mayoritario en la Cámara Alta solo requería la mayoría simple, toda vez que no se trataba de una reforma constitucional, el coordinador Ricardo Monreal y los partidos de oposición tuvieron la madurez política y la altura de miras para cumplir con la palabra empeñada en la aprobación de la reforma constitucional en materia de Guardia Nacional, en el sentido de construir un acuerdo de unanimidad.

 

Los cuatro proyectos de decreto fueron turnados a las comisiones Unidas de Puntos Constitucionales, de Seguridad Pública; y de Estudios Legislativos, donde fueron dictaminadas y remitidas al Pleno. Cuando la máxima instancia de decisión del órgano legislativo, recibieron los proyectos por el que se expiden la Ley de la Guardia Nacional; por el que se expide la Ley Nacional sobre el uso de la Fuerza; por el que se expide la Ley Nacional de Registro de Detenciones; y por el que se modifican diversos artículos de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se sometieron a discusión.

 

Observamos un debate ejecutivo pero sustancial. Las presidencias de las Comisiones decidieron no realizar posicionamiento para presentar cada uno de los proyectos y se planteó una intervención por partido y la del Senador sin partido. Aunque los proyectos fueron votados de forma separada, en un solo momento los oradores se refirieron a los cuatro en un mismo momento.

 

Los posicionamientos iniciaron con el Senador sin partido, Emilio Álvarez Icaza, quien destacó la voluntad política de Morena para buscar la unanimidad, así como la participación de la oposición. No obstante, concluyó diciendo que votaría en abstención porque no comparte la manera de concretar la discusión de los acuerdos parlamentarios sin emplear el Parlamento Abierto. Continuó la Senadora Eunice Renata Romo Molina del PES, quien dijo: “la Ley de la Guardia Nacional recoge puntualmente el espíritu de la reforma constitucional y garantiza el respeto a los derechos humanos”.

 

En su oportunidad, el Senador Miguel Ángel Mancera Espinosa del PRD, expresó: “en la aprobación de estas cuatro normas no se requiere de una mayoría calificada pero la posición del grupo mayoritario fue de conciliación y acercamiento con los grupos parlamentarios para lograr el consenso y la voluntad política para escuchar las posturas de todas las fuerzas políticas en beneficio de la nación”.

 

La Senadora Verónica Noemí Camino Farjat del PVEM, señaló que al lograr los consensos para aprobar la expedición de las Leyes Secundarias “se concretó un marco legal para construir otro institucional que de confianza y evalúe las políticas públicas en la materia en términos de respeto a los derechos humanos”. Al hacer uso de la voz, la Senadora Geovanna del Carmen Bañuelos De la Torre del PT, mencionó: “garantizar la seguridad es la función principal del Estado, por tanto, era necesario crear un marco jurídico que diera sustento a la Guardia Nacional”.

 

El Senador Dante Alfonso Delgado Rannauro de MC, indicó: “en la discusión de la creación de la Guardia Nacional se enfatizó el carácter civil de su mando, en beneficio de la población y evitar la militarización de este nuevo cuerpo de seguridad”. Por otro lado, manifestó “se recogieron opiniones internacionales en materia de seguridad y derechos humanos las cuales fueron plasmadas en los cuatro ordenamientos que hoy se presentan”.

 

El Senador Miguel Ángel Osorio Chong del PRI, refirió: “los acuerdos legislativos en la LXIV Legislatura en materia de seguridad pública deben ser el ejemplo para avanzar para que al país le vaya mejor y tenga paz y seguridad”, y pidió a la mayoría y al gobierno “aprovechar los consensos del Congreso para llevar al país a un nivel de seguridad y bienestar que no sólo rinda las ventajas a unos sino a todos los mexicanos”. El Senador Damián Zepeda Vidales del PAN, comentó: “la inseguridad no es un tema de partidos ni de un gobierno particular sino un asunto de Estado. Explica que las leyes secundarias en materia de Guardia Nacional privilegian el interés común de todos los mexicanos y conservan un mando civil”.

 

Por último, el Senador Ricardo Monreal Ávila de Morena, destacó el trabajo del Senado, precisando: “siempre defendimos la integridad y autonomía del poder legislativo”; al referirse al acuerdo construido, señaló que “se pudo haber votado por la mayoría simple”, pero que en el grupo parlamentario de Morena decidieron actuar con congruencia, consecuencia y seriedad. Indicó que todavía horas antes de la aprobación se tenían presiones y desafíos. Después de expresar que “coexistir pluralmente, sí vale la pena”, reconoció a las y los legisladores de todas las fuerzas políticas que participaron en la discusión y redacción de los nuevos cuerpos normativos. Instrumentos legales y legítimos en su aprobación.

 

Al concluir las intervenciones, se procedió a la votación correspondiente. Los cuatro proyectos fueron votados de forma separada y aprobados en lo general y en lo particular en un solo momento, toda vez que no hubo reservas. La Ley de la Guardia Nacional, la Ley Nacional de Registro de Detenciones y las modificaciones a diversos artículos de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública fueron aprobadas con 114 a favor, 0 en contra y 1 abstención; mientras que la Ley Nacional sobre el uso de la Fuerza obtuvo 110 a favor, 0 en contra y 1 abstención. Todos fueron turnados a la Cámara de Diputados para los efectos del artículo 72 constitucional.

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