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Alejandra Cerecedo Constantino

@alejandraconst

 

En el proceso electoral de 2018, cuando trabajaba en el área de comunicación social del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), específicamente en la Sala Regional Toluca, se presentaron muchos juicios interesantes relacionados con causales de nulidad de elecciones.

 

En una ocasión, se analizaron dos juicios muy particulares en donde los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN) buscaban impugnar una sentencia del Tribunal Electoral del Estado de México (TEEMex) que había confirmado los resultados de la elección de miembros del ayuntamiento de Tonanitla. Al presentarse un empate, se había ordenado la celebración de una elección extraordinaria; no obstante, los magistrados realizaron una valoración de los votos nulos y confirmaron la validez de un voto en donde estaba visiblemente marcado el recuadro del PRI y al reverso de la boleta, tenía una marca con una tinta diferente.

 

Ese día fuimos testigos de cómo, por un voto, incluso catalogado en primera instancia como nulo, se gana o se pierde una elección. Sobre esa historia platicaba con José Adolfo Ibinarriaga en el Diplomado de Comunicación Institucional y Diseño de Campañas Políticas; luego de que proyectó durante la sesión, uno de los spots que produjo para la campaña presidencial de Rafael Correa en Ecuador, en donde curiosamente, un joven no había salido a votar y el partido conservador había ganado precisamente, por un voto.

Al respecto de la designación de la nueva Ombudsperson de la CNDH, considero que hay cosas que son ética o moralmente incorrectas, pero son legales, (como la ideología partidista y el haber sido candidata a Diputada Federal por Morena); hechos que claramente pudieran restar autonomía; pero peor aún, es caer en la ilegalidad de los procesos democráticos. En este caso, la legislación es clara al mencionar que se requiere “el voto de las dos terceras partes de los miembros presentes de la Cámara de Senadores”, al ser 116 se necesitan 78 votos en lugar de 76 para lograr una mayoría calificada.

Otro evento que ha sacudido las redes recientemente es la renuncia de Evo Morales a la Presidencia de Bolivia, un hecho suscitado luego de convocar a nuevas elecciones. Es una tristeza que lo que parecía un avance histórico para la democracia en América Latina, gracias al informe de resultados derivado de las misiones de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA); se haya visto opacado y viciado por un golpe de Estado militar.

“Fíjate, a usted le consta, a usted le consta, cuánto he criticado a Evo y cuánto he criticado a López Obrador; pues con todo eso, yo creo que darle asilo es una buena medida” me comentaba Javier Aparicio hace unas horas y estoy de acuerdo, porque la intervención del ejército debe ser la última vía, más aún cuando se estaba logrando un gran avance por la vía constitucional.

Como señalaba Claudio López Guerra, no es lo mismo “ocupar el poder por mucho tiempo bajo un sistema de reglas preestablecidas, que modificar las reglas a medio camino de tal manera que le permitan a uno preservar el poder.”

 

Sin embargo, es un retroceso para la democracia cuando se juega con la misma moneda, con la moneda de la imposición en lugar de la de la conquista. Pronunciarnos ante los temas que importan es parte del ejercicio democrático que tenemos todos como ciudadanos. Más allá de ideologías y más allá de personajes, debe haber legalidad en los procesos, cuidemos la democracia que tanto nos ha costado alcanzar.

 

 

 

 

Alejandra Cerecedo

Licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad Veracruzana (UV), Estudiante de Ciencia Política y Administración Pública en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Estudiante del Diplomado en Análisis Político Estratégico por el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) Cuenta con un curso en Technology Entrepeneurship por Universidad de Stanford. Ha sido premiada con un Master en Alta Dirección por la Organización Continental de Excelencia Educativa (ORCODEE) Actualmente es columnista en The Mexican Times, Roastbrief y las revistas Campaigns & Elections y Líder Veracruz.