Por René Cervera Galán
En el modelo electoral que aceptamos o proponemos, se encierra el concepto que entendemos debe ser la democracia. Hay quienes consideran que entre más presente este la voluntad ciudadana en los órganos de gobierno mejor es nuestro modelo electoral.
Hay quienes están a favor de quitar los diputados que popularmente se les conoce como diputados de partido y dejar exclusivamente los legisladores elegidos por mayoría relativa en un espacio llamado distrito electoral y hay quienes están a favor de que el cuerpo legislativo sea producto de una elección tomada en los partidos políticos, y avalada por los electores, para que de esta manera cada fuerza política este en el congreso nacional en función del porcentaje de votos obtenidos, y desde luego hay quienes están de acuerdo con el modelo mixto actual.
La polémica se ha desatado porque MORENA, presuntamente de izquierda coincide con el pasado del PAN y el PRI presuntamente ubicados en la derecha del espectro ideológico, en la propuesta de quitar los zánganos como ellos dicen en sus textos publicados en las redes sociales, refiriéndose peyorativamente a quienes escogen o deberían escogerse en el interior de su partido, refiriéndose a los diputados plurinominales.
Y no es la primera vez que MORENA representa un modelo conservador. Sucede que cuando los partidos políticos llegan al gobierno, como la clase media aspiracional se vuelven egoístas a la hora de distribuir el poder.
MORENA propone desaparecer la figura de los diputados de partido o correctamente hablando diputados y senadores plurinominales. Si logran su objetivo, la consecuencia sería que solamente el voto de quien obtuvo más sufragios, aunque sea con una mayoría muy relativa en una disputa entre 7 o 10 partidos políticos quedaría representado.
Matemáticamente es posible que con un 15%, un o una diputada uninominal se adjudique la representación del 85% que no le voto.
Si lo pensamos de manera contraria en el modelo relativo proporcional la opinión de todos los electores estaría presente en función de la elocuencia de cada partido político, menos los que no alcanzaron la valla electoral.
Si analizamos el promedio de quienes ganan la diputación por vía distrital, encontraremos que suelen estar por debajo del 40%, el Consejero Nacional electoral Uuc-kib Espadas Ancona dice que en este proceso subió a un 46% pero anteriormente ha estado en un 38 % , quien esto escribe percibe que aún es menos pero el caso es que sin diputados plurinominales las leyes serían emanadas de una minoría automática y si a eso le agregamos la muy probable posibilidad de que el próximo ejecutivo no tenga la mayoría absoluta, este sería un país gobernado por una minoría mañosamente legitimada.
Es importante señalar que menos los diputados electos como candidatos sin partido los demás son elegidos por los partidos políticos para participar ya sea por vía uninominal o plurinominal, en lo que Ahora le llaman una partidocracia, pero cabe hacer notar que los ciudadanos siguen votando más que por personas particulares. por partidos políticos con los que se identifican y que entre más ciudadanos participen conscientemente menos perniciosa será la partidocracia, digamos que el aval de un candidato es el partido que lo postula, así que al cruzar un logotipo el elector tiene una idea del perfil de por quién vota.
Hay ventajas cívicas y económicas en el modelo representativo proporcional, la ventaja cívica es que pone al centro de la campaña electoral las plataformas de gobierno de los contendientes institucionales y no el talante de los candidatos, de esta manera da lugar a la reflexión sobre cómo debemos vivir colectivamente, como nos debemos relacionar, con que valores éticos y obliga de mayor manera a los partidos políticos a realizar un diagnóstico, encontrar el origen de los problemas y proponer soluciones.
El sistema relativo proporcional obliga a los partidos políticos a capacitar y proponer a sus afiliados más capaces en el marco de la política y no reducen la capacidad de sus candidatos a ganar el voto a como dé lugar.
No es ventaja menor la reducción del costo electoral ya que si tan solo hay candidatos plurinominales, se organizan 4 circunscripciones electorales procurando que haya diputados de todos los estados, se hace innecesaria la existencia de 300 oficinas del INE como sucede actualmente, tampoco es necesario que los y las legisladoras tengan casas de gestión ya que esta sobre entendido que un diputado representa un proyecto nacional y no un espacio físico y se evita la campaña de candidatos de cada partido en 300 distritos. Por ejemplo, en el proceso electoral reciente fueron 10 partidos políticos x 300 distritos electorales significaron 3000 campañas.
El argumento de que esto priva a los electores de elegir directamente quien lo represente, es cuestionable, un distrito electoral es la división del número de habitantes en la república entre 300 distritos que resulta 400.000 más o menos; entre un distrito y otro puede haber 15% menos o 15% más, el número de empadronados es …pongamos que 250 mil, así que imaginemos que debemos escoger quien nos representa entre las personas que llenan dos estadios y medio como el coloso de Santa Úrsula ¿Sinceramente hay los elementos de juicio para escoger confiadamente a quien nos represente?
Hemos vivido la experiencia de procesos electorales con mucha frivolidad, candidatos que destacan por su actuación, por su canto o estilo de boxear o de correr, candidatos que controlan la venta en la vía pública de manera corporativa , pero no por su sensibilidad política social, permitir que solo haya diputados por distrito es quitarle seriedad a la política cuando de ella depende la calidad de empleo, la seguridad jurídica , el acceso al conocimiento, la equidad económica, la paz social y muchas cosas más.
