Por Mauricio Balderas Villicaña
@MauBalderasV
Los primeros días del mes en curso, el Presidente de todos los Mexicanos presentó al Congreso de la Unión una iniciativa que pretende sean reformados los artículos 25, 27 párrafo VI y 28 párrafo IV de nuestra Carta Magna para frenar el abuso de las empresas internacionales del sector eléctrico que se enriquecen a costa de las riquezas naturales de los mexicanos.
Dicha iniciativa plantea que la CFE generará mínimo el 54% de la energía eléctrica y podrá adquirir el 46% a los productores privados, quienes a su vez solo podrán venderle energía a la CFE.
Hay partidos que defienden a capa y espada la iniciativa del Presidente, otros que no y 50 empresas internacionales que forman parte del Concejo Ejecutivo de Empresas Global se pronunciaron al rotundo rechazo de la iniciativa del mandatario en turno.
Ante ello, ya ven con una enorme preocupación la eventual aprobación de la iniciativa debido a que afectaría la competitividad, sus costos aumentarían y no se tendrían energías limpias como en otros países ya le están apostando.
Sin duda, valdría muchísimo la pena estudiarla con detenimiento, con expertos en mesas de diálogo y análisis para un mejor entendimiento simple, qué es lo que en verdad queremos para la industria en México. Ya que somos nosotros las actuales y futuras generaciones de nuestro país.
Aproximadamente quedan 18 sesiones ordinarias en San Lázaro del primer periodo del primer año de esta Sexagésima Quinta Legislatura. Enfatizó se deben conocer todos los puntos de vista y escuchar las inquietudes para así poder para tomar una decisión firme y acertada.
Así que hay que apretar el pasó para que todo salga de la mejor manera posible. Debido a la trascendencia e importancia de la iniciativa, es vital que su análisis y discusión sea con la responsabilidad que amerita, a fin de que, al momento de votar su aprobación, se pueda tomar la mejor decisión para la nación.
El propósito principal es que el estado recupere su rectoría en materia eléctrica y energética. Esto es algo que no se puede ni debe perder de vista.
No debemos de olvidar que es muy importante garantizar la seguridad energética de todas las familias. Son tiempos de definiciones, así que hagamos las cosas que favorezcan a nuestra patria.
Por el bien del desarrollo de nuestro País, todas las voces deben ser escuchadas, la pluralidad política enriquece nuestro sistema democrático para poder lograr un mejor consenso entre todas las bancadas.
¿Usted qué opina?
