Por René Cervera Galán
… ¿Cómo debemos relacionarnos entre individuos, sociedad y Estados?: Es una pregunta permanente. Los que saben de filosofía nos cuentan que el pensamiento organizado construye una tesis a la que le responde una antítesis y en diálogo–debate se forma una síntesis.
Es importante comprender que todo núcleo social está formado por distintas personas que tienen identidad propia, la diversidad enriquece el pensamiento. Así que demandar libertad de expresión implica generar condiciones para comprender y emprender distintas realidades.
Lo aprendido en una escuela es la experiencia sistematizada de muchos años de historia, el error y acierto en constante ensayo tiene vigencia, y que mejor si el conocimiento es alimentado con las experiencias de otras culturas sin descalificarlas de antemano.
En todo momento de la historia han existido grupos que pretenden imponer el pensamiento único, descalifican lo que no entienden o lo que no se ajusta a sus intereses y así sucede en la llamada globalidad. Se anunció el fin de las ideas y se ofertó el capitalismo como modelo único, así que la estructura del capital resulta autoritaria si no ofrece alternativas reales.
La propuesta del neoliberalismo es poner en la boleta dos partidos y si son gemelos les parece mejor, el modelo idóneo en su entendimiento es el de Estados Unidos de Norte América en donde demócratas y republicanos son como los policías de sus series, en la oposición uno juega como el policía bueno y en el gobierno como el policía malo.
No se llega a un acontecimiento histórico sin antecedentes, ya en la primera guerra mundial, se manejó el concepto de las democracias contra los gobiernos autoritarios, curiosamente la Rusia Zarista quedó en las democracias y poco tiempo después se repitió la historia con la Unión Soviética aliada de quienes manejan la presunción de ser demócratas.
La llamada Guerra Fría repite la idea “demócratas” contra dictaduras comunistas y hoy en día se repite la fórmula, Europa occidental es un ejemplo democrático, la del Este no tanto, pero es Europa y apoyan al gobierno de Ucrania que tiene de origen un golpe de Estado.
La censura está intencionada en ambos lados del conflicto, pero quienes al practicarla caen en la incongruencia son quienes lo hacen en el nombre de la democracia. Si el sentido de la democracia es que los ciudadanos elijan a quienes les gobiernen, no es válida la injerencia de quienes pretenden manejar las conductas de los pueblos desde el exterior, la soberanía es muy importante en toda democracia.
Con las alianzas geopolíticas y la formación de bloques estratégicos, se fue dando lo que los europeos llaman soberanía compartida, pero cuando se ve la supeditación que hoy tienen y el enorme riego a lo que los lleva su alianza militar con USA en la OTAN, más el resultado de las penas económicas aplicadas a Rusia que se revirtieron en su contra, es de lamentar que hoy sean a los Estados Unidos de América lo que en el pasado fue Latinoamérica a la península Ibérica.
La globalidad impuesta con violencia y falsedades con una región hegemónica está en resaca, ya no pueden hacer lo que quieren sin contrapesos, hay quienes afirman que la democracia tiende a desaparecer y hay quienes pensamos que lo que tiende a desaparecer es la superficialidad de un modelo económico y político, que genero más especulación que productividad.
En los últimos años se ha hecho hincapié en el derecho de las minorías y la inclusión. En los hechos la minoría que adquirió más derechos fue la elite económica y la inclusión más bien funcionó como absorción.
Es verdad que la democracia se enfrenta a mayores dificultades en un mundo donde China y Rusia serán inevitablemente protagonistas hegemónicos; dificilmente sus culturas adoptaran procesos electorales incuestionables, porque nunca ha sido parte de su historia.
Espero el advenimiento de una nueva era en donde la ciudadanía se organice en pensamientos políticos alternativos, con diagnósticos precisos, ofrezcan soluciones posibles a corto y mediano plazo, en donde se comprenda que la equidad social es un elemento democrático que requiere medios de comunicación libres que no tomen dictados de lo que les ordena el poder político y económico, con autoridades que respeten la voluntad ciudadana y sean solidarios con las causas internacionales sin violentar su soberanía. También es fundamental que los pueblos orientales comprendan las ventajas de la pluralidad de pensamientos y encuentren el modo de reglamentar su convivencia.
Voto a favor de que las democracias occidentales entiendan que, si los poderes de facto rebasan las autoridades electas, la democracia pierde sentido. Pero sobre todo y de especial manera, espero que el mundo comprenda la multipolaridad y aprenda a dialogar, buscando la satisfacción de culturas heterogéneas anteponiendo la solidaridad al egoísmo y responsabilizándonos del medio ambiente.